La Daniela Goya, C/ Del General Pardiñas, 21, 28001 Madrid, España

Hacia un buen tiempo que no comía uno con un gusto tan bueno.Sin ninguna duda volveré y se lo recomendaré a mi entorno.Proseguir de este modo.Las camareras muy profesionales y cercanas. Es un indispensable para tomar un óptimo cocido, especialmente en un día frío y lluvioso como el que fuimos. El cocido clásico, con sus tres vuelcos y la cantidad justa, sin que te quedes con hambre y sin que te mueras de pena porque sobren… Un espacio satisfactorio, familiar, con un trato magnífico. Buen producto con raciones rebosantes, los pequeños repitieron de sopa y nos sacaron mucho más.

la daniela goya, c/ del general pardiñas, 21, 28001 madrid, españa

Lánzate a probar sus nada desdeñables platos de cocido, asimismo sus elaboraciones de tapas y de croquetas. Ya que no se por que la gente no posee tan buena cuenta de este ubicación. El cocido estaba delicioso y no me arrepiento de haber escogido La Daniela para evaluar por vez primera un auténtico cocido madrileño. Sólamente nos dejaron comer cocido, no nos dieron ni la carta ¡y eso que ibamos con niños!. El trato del personal malo, sólo te sirven lo que quieren y de la broma no sabíamos ni el precio. El cocido simple, el de casa mejor.

Treze Restaurante 73

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la daniela goya, c/ del general pardiñas, 21, 28001 madrid, españa

No se puede reiterar con esas proporciones, salvo que algun comensal renuncie. Con un vino tinto, tres postres, una tarta de chocolste con almendras floja, de queso con nueces un tanto mejor y natillas pasables, mas cafes, 158€. Podrian ser mas espléndidos con las racioned.

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Indudablemente, correcto para la calidad de la comida aunque el local es muy mejorable. El local tiene una decoración clásico, poco cuidada y con todo el sabor de las típicas tabernas madrileñas. En la entrada, nos encontramos con una barra de buenas dimensiones en las que se pica bastante bien por si se quiere buscar una opción alternativa al cocido.

Luego, dos salones, uno interior muy ruidoso y poco aconsejable y otro, a mano derecha, con ventanas a la calle General Pardiñas que es nuestra principal recomendación. No dejéis de recordárselo al realizar la reserva ya que es mucho más satisfactorio. Por cierto, la reserva es absolutamente precisa. El cocido en si, muy bueno y en proporciones rebosantes. El servicio un poco tosco y el Precio un poco prominente (28 €) para lo que teóricamente es un plato tradicional de bajos recursos madrileño. Una taberna cañí por los 4 costados.

Uno de los sitios que mas recordarás de la ciudad de La capital de españa se llama Taberna La Daniela. Se aconsejan sus tortillas individuales. En cuanto a vinos, poco que mencionar.

Ofrecen la tradicional cocina castellana y madrileña, y además avisan de que el cocido es el más destacable de La capital de españa. Con esos antecedentes, había que probarlo. Estaba bueno, de los mejores que he podido evaluar, si bien no creo que sea el más destacable de La capital de españa. Es mucho más, creo que resaltan mucho más por otras especialidades que por el cocido. La cocina la desconocemos absolutamente puesto que siempre hemos tomado Cocido Madrileño y es de lo único que podemos charlar. Y a este respecto, no hay ninguna duda, es un espacio que hay que conocer ya que la popularidad está completamente justificada.

Lo embotella para la Daniela Jesús Díaz, un productor de Colmenar de Oreja que trabaja bien tanto la garnacha como la tempranillo y ofrece caldos fáciles pero con muy buenas relaciones calidad/precio. A modo sugerencia podrian ofertar mediar porciones, cuando van solamente 2 personas con las porciones enteras es difícil evaluar varias cosas. Si puedes ir con tus nietos; no sé si tienen algo semejante a menú infantil… Si optaras por el cocido, la solución sería soliciar para menos y repartir.

Una taberna habitual madrileña con decoración en madera y cuadros de la temporada. Rincón perfecto para tomar unas tapas con los amigos o para probar un buen cocido madrileño. El precio no es alto, pero la calidad y cantidad de los platos sí lo son, conque mucho más te vale ir con hambre o la cocinera se enfadará.